Como ya hos he contado a algunos, es tradición entre muchas compañías de teatro (sobre todo las de aficionados, pero también algunas profesionales) , cuando va a estrenarse una obra, recorrer las calles todos juntos para poner los carteles anunciando el espectáculo. Es la llamada "pegada de carteles".
Suele hacerse de noche, tras un ensayo general, para que por la mañana la ciudad amanezca empapelada con los posters de la compañía. Los supersticiosos dicen que trae suerte para el estreno.
La nuestra es una versión light pero es válida de todas formas.
El mundo de la farándula está lleno de supersticiones, algunas con un origen claro. Otras, no tanto.
Aquí os dejo algunas, como curiosidad.
El color amarillo (¿o era el verde?): la verdad es que no se ponen de acuerdo, pero dicen las malas lenguas que vestir uno de estos colores en escena trae mala suerte. Egeo va vestido de amarillo, por lo que seguro que el gafado es el verde.
El origen de esta superstición parece estar en el rumor de que un famoso dramaturgo y actor frances (Molière) murió en escena llevando un traje verde o amarillo.
A mal ensayo buen estreno: más que una superstición, es la sabiduría de los expertos, o tal vez una forma de darse ánimos.
Se refiere al último ensayo antes del estreno, que suele ser un desastre, un poco por los nervios, un poco por el cansancio, un poco por el perfeccionismo de directores y actores. No es que sea una norma, si el ensayo general es bueno, por supuesto que también lo será el estreno.
Yo, personalmente, nunca he visto un último ensayo perfecto.
¿Cómo será el nuestro?
Eso suponiendo que haya un "Último ensayo"... Porque las luces y el sonido verán las luces y se harán oir apenas minutos antes de la matinée (el preestreno del viernes, para quien no lo entienda). Pobresicas, ¡ay como se les ocurra equivocarse!
ResponderEliminar¡Maldito el momento en que dejé que mi nombre apareciera junto a lo de "Luz y Sonido..."! (Y no hablo de lo de los "Efectos especiales", porque como salga el humito que salió ayer en el Palau... ¡Tierra trágame y mastica con rabia!)
Recuerda, Medea: Líquido, primero. Luego, polvito. TODO EL POLVITO.
¡Mucha mierda!
Y ahora que lo pienso... lo que nos cuentan las supersticiones es sobre "el último ensayo antes del estreno" ¿PERO QUÉ PASA CON EL ÚLTIMO ENSAYO ANTES DEL PREESTRENO?
ResponderEliminarAhí hay un vacío legal...
xD
ResponderEliminarvoy a morir, ¿cierto?
Uh... es igual, déjalo, he estado consultando varias páginas en busca del color de la superstición y sí, moriré.
ResponderEliminarCuando se me pare el corazón en escena que alguien salga grite: '¡en tributo a Jean-Baptiste Poquelin, "Molière"!'
El cadáver se lo podéis dejar a mis padres, estarán por allí.
Que nooooooooooooooooooo.
ResponderEliminarEn realidad la superstición tiene más posibles orígenes: el color amarillo se asociaba a Satanás, por lo que era de mal augurio. Por otro lado, los agentes teatrales solían vestir de verde, por lo que el color no era usado por los actores.
En la actualidad, más que por superstición, se mantiene la tradición por motivos técnicos. El verde y el amarillo son colores difíciles de iluminar (como descubrirá pronto Guille, je, je ,je).
xD
ResponderEliminar